1.11.11

La nena no está bien

Chicos me pasó algo horrible. Pero antes de contarles quiero pedirles a todos los hombres que dejen de leer. O aprendan.
Un día me di cuenta de que estaba meando muchas veces. Pero que en realidad cuando iba, no meaba y además me ardía la chuchi. Cuando pasan estas cosas es como que no podes definir el momento exacto en que te empezó a pasar. De golpe te encontras con esta situación el día que tenes que ir a un recital y te imaginas yendo cada 15 minutos al baño químico y te dan ganas de extirparte todo. Entonces le consultas a tu compañera de trabajo adicta a los fármacos y te da una pastilla y te anota un nombre en un papel que además dice "3 por día durante 3 días". No entendes porqué no compra el título de Giselle Rimolo y empieza a recetar remedios, pero le haces caso porque ir a una guardia requeriría estar depilada y tener tiempo. Y no es el caso.
Preferís automedicarte, juntarte con tu amigo a tomar fernet con coca en el camino, e ir al recital. Tratas de hacer de cuenta que no tenes ganas de ir al baño, así que es como si no tuvieras. Igual vas. Y así, como si la pastilla que tomaste hubiera sido mágica, te deja de arder. Ni te das cuenta que ya no te arde hasta que a los pocos días te empieza a picar. Y ahí extrañas el ardor, que no te hace contorsionar las piernas adelante de cualquiera. Te pica una noche entera. Sabes que te picó toda la noche porque no pudiste dormir pensando qué clase de gérmen tendrás ahí abajo, si deberías prender fuego todas tus bombachas, si deberías levantarte e ir a la guardia, o qué. Pero obvio, elegís la salida fácil. Llamas a las 8 am a tu amiga fanática de los remedios vaginales (si, chicos, hay gente para todo) y le transmitís tanta desesperación que te manda a comprar unos ovulos. OVULOS? jamás use uno. No se ni como se ven.
Pero no tenes tiempo que perder. Te bañas, te vestis y salis a Farmacity. La volves a llamar para que te repita el nombre (decidís comprar memorius también -en caso de que exista y sea para la memoria-) y te aconseja usar una toallita. TOALLITA? CUANDO NO ESTÁS MENSTRUANDO? ESO NO PUEDE SER BUENO. Te agarra miedo y recorres las góndolas con ansiedad. No lo encontras y no te queda otra que preguntarle al chico del sector farmacia. Gracias a Dios, ahora todos saben que tenes algo en la concha. Pero también saben que estas haciendo algo para dejar de tenerlo. Piensenlo, no es tan grave. Y pasas todo el día en el trabajo esperando que llegue la noche, contorsionando las piernas. No creo que quieran detalles del momento de la colocación. Pero tardé solo media hora en abrir el coso ese que parecía esos delineadores tipo crayoncitos chiquitos, pero amarillo y envasado al vacío. Después me explicó una compañera de trabajo que no era necesario usar el alicate para abrirlo, que en todo caso una tijera hubiera sido más apropiado, pero que igual, tiene como dos pestañas que cuando las separas, como por arte de mágia sale el óvulo. Tampoco sabía que tan adentro tenía que ir, pero entendí porqué mi amiga me dijo que use toallita. Ahora es cuando los hombres realmente tienen que dejar de leer. Fue como menstruar amarillo toda la noche. Fue horrible. Por suerte el ardor y la picazón desaparecieron. Y ahora, mi chuchi y yo tenemos una relación más estrecha. O bue, no se si "estrecha" es la palabra. Así que muchas gracias a todos los que me ayudaron en este momento difícil y me dieron la confianza para poder decirles "me arde la concha" y no juzgarme. Gracias.

3 comentarios:

Camila dijo...

ajajajaja sos una hdp tengo que ir a rendir y me cuelgo leyendote

Ines dijo...

Marian!!! Sos genial!!! Me haces reir hasta cuando estoy bajon!!! Besoteee

mapii dijo...

jajaja siempre tengo un buen remedio para ese tipo de inconvenientes, no se por qué no me dan el titulo de ginecologa
bueno, para la proxima ya sabes!
besiiii